La tecnología, una influencia innegable en nuestras vidas, lamentablemente ha sido una fuente de contaminación intelectual que impacta negativamente en nuestros hogares y familias. A veces se hace referencia a los teléfonos inteligentes como el burdel del siglo XXI, principalmente debido a los algoritmos dañinos integrados en todas partes. Sin embargo, hay un lado positivo en medio de esta preocupación a medida que somos testigos del aumento de las defensas digitales que luchan por mejorar nuestra sociedad. Uno de esos poderosos aliados en esta batalla por la decencia es la inteligencia artificial (IA). Si bien los temores sobre las implicaciones de la IA en nuestras vidas son comprensibles, es importante reconocer su potencial como fuerza para promover la salud, la seguridad y el avance de una sociedad decente.
Aunque los modelos de chat carecen del pensamiento crítico y la creatividad inherentes en la sangre roja de los seres humano, poseen la notable capacidad de trabajar incansablemente sin experimentar fatiga física o necesidad de renovación emocional. Al reconocer las deficiencias de ambas entidades, podemos utilizar las mejores cualidades de ambas cuando trabajamos juntos. Esta combinación de sabiduría humana y tenacidad de la IA en el trabajo se denomina oficialmente Inteligencia Aumentada, un concepto que es prometedor en numerosos ámbitos. En el ámbito de la lucha contra la pornografía y el tráfico sexual, organizaciones como Epik Project y Street Grace han aprovechado esta potente unión para el mejoramiento de la civilización.
Un excelente ejemplo es Gracie, una IA desarrollada por Street Grace. En apenas cinco meses. Gracie ha logrado avances significativos y ha ampliado su alcance a 25 estados y 78 ciudades. En el proceso, ha entablado más de 54.000 conversaciones con personas que buscan comprar acceso sexual tanto a adultos como a niños, desviando sus esfuerzos. En particular, Gracie denunció más de 6.000 depredadores potenciales a las autoridades encargadas de hacer cumplir la ley (Watt, 2023). Es fundamental reconocer que el problema del tráfico sexual busca constantemente nuevas vías de explotación y sigue planteando una amenaza importante. No faltan individuos a los que explotar. Por eso, apaciguar a los compradores potenciales es el enfoque más eficaz. Sin embargo, abordar este problema requiere una inmensa cantidad de mano de obra, que las organizaciones de defensa no pueden permitirse mantener a la altura de estos grupos adictivos y depredadores. Aquí es donde sobresalen los robots impulsados por IA, como Gracie. Los programas de Inteligencia Aumentada, como Gracie, poseen la capacidad de identificar jerga y analizar rápidamente grandes cantidades de datos conversacionales en tiempo real. Al hacerlo, disuade efectivamente a los compradores potenciales de participar en industrias explotadoras. Además, Gracie ha sido capacitada para reconocer y contrarrestar 15 tácticas diferentes empleadas por los traficantes sexuales, una hazaña lograda a través de una extensa investigación realizada por el Centro Nacional sobre Explotación Sexual, o NCOSE por sus siglas en Ingles (Van der Watt, 2023).
Si bien la llegada de la Inteligencia Artificial, como cualquier otro desarrollo tecnológico importante, presenta un arma de doble filo, en última instancia corresponde a la humanidad determinar su utilización óptima. Sin duda, la IA puede lograr objetivos predefinidos de manera eficiente, pero la responsabilidad de interpretar y participar en la toma de decisiones morales y espirituales críticas sigue siendo un privilegio exclusivo de los seres humanos. Así como cualquier herramienta puede ser fuente de daño si se usa incorrectamente, la IA tiene el potencial, como el fuego, de quemar las manos que la empuñan o de proporcionar alimento a aquellos a quienes sirve. Sin embargo, los líderes tecnológicos, en colaboración con NCOSE, todavía enfatizan la necesidad de actuar con cautela (Oliver, 2023). Los esfuerzos de estas organizaciones demuestran que, de hecho, existen aplicaciones éticas y beneficiosas para esta tecnología emergente.
Al adoptar la Inteligencia Aumentada, tenemos la oportunidad de aprovechar las fortalezas tanto del intelecto humano como de las capacidades de la IA en la lucha contra la explotación y por la preservación de una sociedad virtuosa. Es imperativo que abordemos esta nueva era de avance tecnológico con una mirada perspicaz y el compromiso de garantizar la integración responsable y ética de la IA en nuestras vidas.
Si desea saber más, siga este enlace para escuchar directamente a los creadores de estos defensores de la inteligencia artificial. https://www.facebook.com/watch/?v=1253658605241547
Referencias:
Humanoid robot face close-up futuristic modern tech chatbot assistance auto conversation background copy space. future Digital Technology AI artificial intelligence concept.
stock photo. Adobe Stock. (n.d.). https://stock.adobe.com/ca/images/humanoid-robot- face-close-up-futuristic-modern-tech-chatbot-assistance-auto-conversation-background-
copy-space-future-digital-technology-ai-artificial-intelligence-concept/441983615
NCOSE, B. (2023, April 14). NCOSE.Using augmented intelligence to reduce the demand
that fosters sex trafficking: Join us for a conversation with Street Grace and Epik project about the fusion of human and artificial intelligence to discourage the demand that
fosters...: By National Center on Sexual Exploitation. Facebook. (n.d.)
Oliver, K. (2023, April 13). The artificial intelligence race must pause until sexual exploitation
issues can be addressed. NCOSE. https://endsexualexploitation.org/articles/the-
Van der Watt, M. (2023). Discouraging the demand that fosters sex trafficking: Collaboration
through Augmented Intelligence. Societies, 13(4), 94.
https://doi.org/10.3390/soc13040094
Watt, B. M. V. der. (2023, April 25). Ai and human intelligence join to discourage the demand
for sex trafficking. NCOSE. https://endsexualexploitation.org/articles/ai-and-human-
intelligence-join-to-discourage-the-demand-for-sex-trafficking/
Comments